(Español) Silvina Moschini: “La tecnología hace que las personas se muestren al mundo por cómo trabajan, no por quiénes son”

Publicada por Innovaspain

Esta emprendedora social argentina es CEO y fundadora de SheWorks! y TransparentBusiness, plataforma en la nube de gestión de equipos remotos

Silvina Moschini (1972) lleva varios años evangelizando sobre los beneficios del teletrabajo y la importancia de la transformación digital. Con el confinamiento provocado por la crisis del COVID-19, su compañía, TransparentBusiness –una plataforma basada en la nube que permite gestionar de forma transparente equipos remotos–, ha adquirido un especial protagonismo. Pero esta emprendedora social argentina también es fundadora de un marketplace para contratar mujeres profesionales con modelos flexibles, SheWorks! y una de las personalidades más relevantes del sector de la innovación gracias a su lucha por cerrar la brecha de desempleo de género a través de la tecnología.

“Sin duda, habrá un antes y un después del COVID-19. Vivimos la tormenta perfecta para que las compañías redefinan sus procesos de trabajo e incorporen tecnología y herramientas para optimizar la gestión de sus equipos distribuidos”, explica. “Lo hemos visto recientemente con Twitter, que anunció que permitirá a gran parte de sus empleados continuar trabajando en casa por cuanto tiempo sea necesario, planteando incluso seguir con el teletrabajo una vez levantadas las medidas de aislamiento. Estas tendencias se multiplican hoy en todo el planeta, porque el coronavirus llevó a que millones de empresas del mundo experimentaran los beneficios del  trabajo remoto. Es una tendencia que llegó para quedarse”.

Para entender la importancia del teletrabajo, Silvina Moschini aporta dos datos: el primero, que la expansión del coronavirus ocasionó que casi 3.900 millones de personas, la mitad de la población del planeta, tuvieran que permanecer en sus casas para evitar la propagación. “Con ello, para millones de compañías trabajar de manera remota es la única opción para seguir operando”. Por otro lado, un reporte de Gartner revela que ocho de cada diez CFOs considera trasladar algunos empleados a trabajar remoto de manera permanente luego del COVID-19.

“En nuestro caso, nacimos como una empresa remote first, sin oficinas físicas, y desarrollamos nuestra solución inicialmente para nuestro propio uso y luego para otras empresas, con las herramientas necesarias para coordinar trabajo remoto con transparencia y verificación del trabajo realizado por el equipo y derribar las barreras y miedos que los CEOs y supervisores pudieran tener con el trabajo remoto”, indica.

Para Silvina Moschini, el teletrabajo cuenta con múltiples ventajas. Pero destaca tres actores muy importantes que se benefician de él. En primer lugar el medio ambiente, con menos contaminación del aire al reducir significativamente las emisiones de dióxido de carbono por menos vehículos y menos atascos. En segundo lugar, las personas, quienes ahorran tiempo y dinero en traslados, ganan mayor flexibilidad al poder administrar sus tiempos y trabajar en momentos que se sienten más productivos.

Y por último, la inclusión laboral, porque permite que aquellos grupos que no pueden o se les dificulta asistir a la oficina ocho horas, como las madres –“el 51 por ciento de las mujeres han tenido que abandonar sus puestos de trabajo cuando se convirtieron en madres y el teletrabajo les ha devuelto la posibilidad de conjugar sus tareas laborales con su vida personal”, asegura–, personas con dificultades de movilidad y los mayores, se reinserten al mercado laboral y tengan su oportunidad de desarrollo.

Ahora que, según Moschini, miles de compañías se ven forzadas a implementar el trabajo remoto sin otra opción, “buscamos ayudar a organizaciones de todos los tamaños en la gestión del trabajo remoto”. Por ello, ha lanzado CloudWorking Academy, una iniciativa de TransparentBusiness en colaboración con Telefónica, Wayra, Cisco Systems, BID, everis y Citrix: una academia para que líderes de empresas gestionen sus equipos virtuales con éxito.

De hecho, Telefónica, a través de Wayra, ya ha colaborado con TransparentBusiness con su inversión. “Nos da un gran impulso para continuar y un aval y un gran alcance porque una compañía como Telefónica, número uno en el mercado de las telecomunicaciones y con presencia en Europa y Latinoamérica, está apostando hacia el futuro del trabajo con transparencia al apoyar a una solución como la nuestra. No solo como nuestro inversor, sino como nuestro socio de distribución para llevar soluciones de trabajo remoto de TransparentBusiness al mercado”.

Y es que, según Moschini, además, la inversión de Wayra “nos ayudará a desarrollar negocio con Telefónica al capitalizar la red de más de 350 millones de clientes que el grupo tiene alrededor del mundo. También tendremos acceso global a la comunidad de inversores y al ecosistema de Wayra y Telefónica en América Latina y Europa”.

Madres ante la economía digital

Silvina Moschini cree que la tecnología genera puentes entre el talento en las oportunidades. “Sin embargo, hoy, en medio de esta revolución digital, muchas compañías esperan que las personas se presenten a una oficina y cumplan un horario fijo porque todavía asocian al trabajo con un lugar al que se va y no algo que se hace. Las empresas dicen que proactivamente buscan contratar más mujeres, y se preocupan porque no hay un pipeline de mujeres para puestos directivos”.

Según ella, “esperan que las personas sigan presentándose en una oficina, cuando el trabajo se hace en base a una computadora, y se atan todavía a modelos rígidos de nueve a cinco. Estos modelos son incompatibles con el estilo de vida que llevan las mujeres, sobre todo cuando tienen hijos, porque tienen que llevar un doble rol, no solo un rol muy activo en la casa, que lamentablemente culturalmente es así, sino también un rol y exigencias profesionales”.

Cuando Moschini creó SheWorks!, pensó en generar un marketplace de talento femenino en la nube, para conectar a esas mujeres de todas partes que, todavía hoy, más de la mitad abandona los puestos de trabajo cuando se convierten en madres por no poder conciliar su vida personal y profesional.

“Ahora tenemos más de 20.000 mujeres de 93 países que trabajan con compañías como EY, Cisco, SAP, Google, Facebook, Pepsico y muchas más. Además, no solo eso, sino que en un mundo más digital, el talento y las habilidades son más importantes que los títulos universitarios. Es por eso que creamos una academia global que promueve las habilidades más requeridas por las compañías para que estas mujeres puedan ser competitivas, avanzar y desarrollar sus carreras”.

Moschini pone un ejemplo: hace dos semanas, concluyó el primer programa de mujeres de SheWorks! Academy en Guatemala, una iniciativa que llevó adelante con el Banco Interamericano de Desarrollo en el país y con distintos aliados. “Recibimos solicitudes de más de 300 mujeres de Guatemala y fueron seleccionadas 60 chicas que se formaron en las habilidades más demandadas por las compañías. No es cuestión de que falte, sino que el talento está… pero las oportunidades están en otro lugar”.

¿Es la nueva sociedad digital una oportunidad para la reducción de la brecha salarial de género? Según ella, cerrar la brecha de género inyectaría 12 billones de dólares al PBI global para 2025 –»cerrarla en España inyectaría 200.000 millones de euros a la economía, según un reporte de PWC junto con ClosingGap», apunta–. “Sin embargo, la participación laboral de las mujeres en Latinoamérica, por ejemplo, aún dista un 26 por ciento con los hombres y más de la mitad de ellas abandona sus trabajos cuando se convierten en madres por no encontrar ese equilibrio entre carrera y familia”.

De ahí la importancia de digitalizar el trabajo: “Permite crear y gestionar nubes de talento con personas de todas partes. La tecnología es el gran igualador de oportunidades y democratiza el acceso al trabajo porque las personas pueden mostrarse al mundo por cómo trabajan y no por quiénes son. Nuestro equipo está conformado por mujeres excepcionales que hoy están desarrollando sus carreras profesionales gracias a este paradigma”.

Silvina Moschini pone el ejemplo de Maricruz Tabbia. “Maricruz Tabbia es parte de nuestro equipo hace más de cinco años. Es una mamá que vive en Franck, un pueblo de 5500 habitantes en Santa Fe, Argentina, y trabaja para compañías como Google en Mountain View desde su casa. Hoy podemos hacer que haya muchas Maricruz que no tengan que movilizarse hacia las oportunidades, sino que puedan estar con sus hijos y desarrollar su carrera sin que esto sea un impedimento”.